Predica; 03 de Febrero de 2019
EL MILAGRO MÁS GRANDE Y DIFÍCIL HECHO POR JESUCRISTO
¿Eres de los que se INVOLUCRAN o los que se COMPROMETEN? De hecho…, cuando Jesús hizo estos milagros PARA NADA le
fueron DIFÍCILES: (Mar 4:39) Y
levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el
viento, y se hizo grande bonanza”. (Lucas
9:16,17) “16 Y tomando los cinco
panes y los dos pescados, levantando los ojos al cielo, los bendijo, y los
partió, y dio a sus discípulos para que los pusiesen delante de la gente. 17 Y comieron todos, y se saciaron; Y
recogieron lo que les sobró, doce cestas de pedazos”. (Lucas 17:12 al 14) “12 Y
al entrar en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los
cuales se pararon de lejos 13 y
alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros! 14 Cuando él los vio, les dijo: Id,
mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que mientras iban, fueron limpiados”. (Marcos 6:49,50) “49 Viéndole ellos andar sobre el mar, pensaron que era un fantasma,
y gritaron; 50 porque todos le
veían, y se turbaron. Pero en seguida habló con ellos, y les dijo: ¡Tened
ánimo; YO SOY, no temáis!”. (Juan 12:17)
“Y daba testimonio la gente que estaba con él cuando llamó a Lázaro del
sepulcro, y le resucitó de los muertos”. Y
muchísimos más milagros que asombran a los que solo se COMPROMETEN. Pero…, para salvarte y darte la oportunidad de que tú y yo
cambiemos Jesús tuvo que ser martirizado, torturado, y clavado
en un madero de tormento y después, ser la burla de todos cuando
fue exhibido desnudo ante toda la multitud, tuvo que morir para este
propósito. El MILAGRO más
GRANDE, es ver tu vida TRANSFORMADA. Cuando una Iglesia está en
el proceso de cambios y transformaciones surgen dos grupos de personas:
Los que se involucran. Los
que se comprometen. Y lo vamos a ver muy claramente por medio del
ejemplo de la vida misma de nuestro Señor Jesucristo cuando resucito,
los Apóstoles iniciaron una etapa de organización para generar crecimiento.
Quizás hoy nuestra iglesia se encuentra ensanchando sus estacas y en proceso de
crecimiento. Cuando se inicia una etapa de estas, sigue una etapa de ajuste y
en el desarrollo se tienen que corregir muchas fallas para poder avanzar cada
vez más.
Veamos
primeramente los que se COMPROMETEN. (Hechos 6:1) “En aquellos días, como
creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos, de
que las viudas de aquéllos eran
desatendidas en la distribución diaria”. Dice la Palabra que hubo
murmuración de los griegos contra los hebreos, en otra versión dice: Los Judíos
extranjeros (griegos) contra los judíos nativos (hebreos). En sí, los que
murmuraron fueron los extranjeros de la tierra contra los moradores de este
lugar. Cómo ejemplo real y verdadero
tenemos que, en la Iglesia, existen
los que están en la Iglesia, simplemente
se COMPROMETIDOS, vienen, asisten, termina el servicio y vuelven y se
van, solo aportan su asistencia,
pero con él, no se cuenta. Las personas
simplemente comprometidas son los que siempre esperan que se les dé, siempre
esperan recibir, pero no dan, y son susceptibles a la murmuración, a la
crítica, al juicio. Son personas que,
si no se les llama, no entran a servir, si no se les motiva,
no hacen las cosas. No
trabajan por sí mismas. En este contexto, quienes se quejaron fueron los griegos o los judíos extranjeros
y se quejaron en nombre de sus viudas. Las personas que simplemente
se comprometen, son aquellos que no se hacen notar, que no se hacen parte de la
visión. Ahora vemos el primer grupo que es al que nos interesa pertenecer.
Los
que se INVOLUCRAN (Hechos
6:2) “Entonces los doce
convocaron a la multitud de los discípulos, y dijeron: No es justo que nosotros dejemos la
Palabra de Dios, para servir
a las mesas”. ¿Cómo reconocemos que pertenecen a los involucrados? Dice
la Palabra que "Convocaron a la multitud de los discípulos", esta
expresión demarca un sentido de pertenencia. en todo tiempo de la vida hay
problemas, si volvemos al ejemplo de los que estamos en la Iglesia, si el nuevo
aspirante tiene estas actitudes: Desvergonzado, descarado, deslenguado o que se
sale y entra sin control, y se hace una gran distracción; Los espectadores, que son los que se comprometieron, se
quedan murmurando; Pero los
que se INVOLUCRAN, rápidamente se acercan al aspirante, para
explicarle que está causando una distracción, a algo importante que es
la Palabra de Dios, aun cuando su vida queda expuesta al peligro de la
murmuración. “Solamente con
siervos INVOLUCRADOS los problemas tienen solución”. El Señor
Jesucristo tuvo que enseñarnos en éste contexto de las Sagradas Escrituras, para
llevarnos a reflexionar con el único
propósito de que fuésemos útiles en sus manos para cumplir con su VOLUNTAD, la cual vemos en los
versículos: (Hechos 6:3 al 6) “3
Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de Sabiduría, a quienes
encarguemos de este trabajo. 4 Y
nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra. 5 Agradó la propuesta a toda la
multitud; y eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, a
Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas, y a Nicolás prosélito de
Antioquía; 6 a los cuales presentaron ante los apóstoles, quienes,
orando, les impusieron las manos”. Su único propósito fue el
de permitirnos extender el reino de los cielos en la tierra. En el versículo
de, (Hechos 6:7) dice: “Y crecía la Palabra del Señor, y el
número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; También
muchos de los sacerdotes obedecían a la fe”.
Iglesia con siervos dispuestos e involucrados los planes de Dios si marchan
sobre ruedas. Ahora te pregunto, ¿De qué lado estas? del lado de los que se COMPROMETEN o de los que se involucran? ¡¡Teniendo
en claro nuestra posición, comprometidos o involucrados!!! Veamos
las características de un hombre que se involucró y que, por
estar involucrado, se le permitió ver la Gloria de Dios. “Esteban”.
Si… Las Sagradas Escrituras
(Biblia) son nuestro Sagrado Manual para nuestra vida, entonces...
La multinacional y la más grande del universo “El Reino de los Cielos”. Anda buscando para trabajadores, para
que trabajen como meseros. Los discípulos buscaban: V 3,7 hombres llenos del Espíritu
Santo, de sabiduría V 5. Varón lleno
de fe y del Espíritu Santo, estos hombres además eran hombres sujetos, puesto que la autoridad solo se les
entrega a los siervos que se saben sujetar. FUNCIONES A DESEMPEÑAR
Servir en las mesas a las viudas. Quizás era una labor que podía pasar
desapercibida, pero que, si no se hacía, daba mal testimonio y la obra no
marchaba bien.
Pero que sucedió, lea conmigo en (Hechos 6:8) “Y Esteban, lleno de
Gracia y de Poder, hacía grandes prodigios y señales entre el pueblo”. En la medida en que Esteban servía y
daba todo de sí, el Señor Jesucristo hacia grandes cosas por medio de él. Y era un mesero. Fue tanta la disposición de Esteban
y lo que se involucró, que el Espíritu Santo lo capacito para hacer
grandes prodigios y señales entre el pueblo. Esteban fue uno de
los primeros creyentes a parte de los discípulos que dispuso su corazón y vio la Gloria de Dios. ¿Qué
hacía diferente a este Hombre? Un
corazón dispuesto e INVOLUCRADO. Cuando
tu dispones el corazón para que el Señor Jesucristo se gloríe, vas a encontrar muchas dificultades.
Veamos con que se enfrentó Esteban: (Hechos
6:9) “Entonces se levantaron unos de la sinagoga llamada de los
libertos, y de los de Cirene, de Alejandría, de Cilicia y de Asia, disputando con Esteban”. Los que
se levanten contra ti (Isaías
54:15 al 17) “15 Si alguno
conspirare contra ti, lo hará sin MÍ; El
que contra ti conspirare, delante
de ti caerá. 16 He aquí que
YO hice al herrero que sopla las ascuas en el fuego, y que saca la herramienta
para su obra; Y YO he creado al destruidor para destruir. 17 Ninguna arma forjada
contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti
en juicio. Esta es la herencia de los
siervos de Jehová, y su
salvación de MÍ vendrá, dijo Jehová”. Los que mienten y levantan falsos testimonios (Proverbios 6:16 al 19) “16 Seis
cosas aborrece Jehová, y aun siete abomina su alma: 17 Los
ojos altivos, la lengua mentirosa,
las manos derramadoras de sangre
inocente, 18 El corazón que maquina pensamientos inicuos,
los pies presurosos para correr al
mal, 19 El testigo falso que habla mentiras,
y el que siembra discordia entre
hermanos”. Incluso te roban la libertad… (de reír, de servir, de dar)
Pero pastor, que difícil es soportar que hablen de mí, que levanten falsos
testimonios y mucho más que me priven de mi libertad, o que quieran poner al
pueblo en contra mía. Es difícil, pero es necesario pagar un precio y en lo que
debemos centrarnos es en como resistir al adversario, La palabra dice: (Stg 4:7) “SOMETEOS, pues, a Dios; Resistid
al diablo, y huirá de vosotros”. ¿Cómo le podemos resistir? Lo primero
es lo más difícil y es someterse a Dios. Lo segundo es través del conocimiento
de la Palabra que hablada con verdad trae victoria en Cristo Jesús; Así lo hizo
Esteban. (Hechos 7:1 al 3, 9, 20, 30, 47)
“1 El sumo
sacerdote dijo entonces: ¿Es esto así? 2
Y él dijo: Varones hermanos y padres, oíd: El Dios de la Gloria apareció a
nuestro padre Abraham, estando en Mesopotamia, antes que morase en Harán, 3 y le dijo: Sal de tu tierra y de tu
parentela, y ven a la tierra que yo te mostraré. 9 Los patriarcas, movidos por envidia, vendieron a José para
Egipto; Pero Dios estaba con él. 20
En aquel mismo tiempo nació Moisés, y fue agradable a Dios; Y fue criado tres
meses en casa de su padre. 30
Pasados cuarenta años, un ángel se le apareció en el desierto del monte Sinaí,
en la llama de fuego de una zarza. 47
Mas Salomón le edificó casa”. En estos versículos nos refiere la Palabra,
la defensa de Esteban ante el
concilio y allí expone todas las vidas con relación con nuestro Padre
Celestial, con sus antepasados desde los tiempos de Moisés. Esto
me deja ver que Esteban era un hombre fundamentado en las Sagradas Escrituras,
porque en este tiempo no existía el instituto bíblico entre los apóstoles, pero Esteban conocía la vida de los que
le antecedieron y los procesos desde la creación, tenía una claridad en
la Sana Doctrina de Cristo, conocía plenamente los fundamentos de sus
creencias. Sin embargo, los
que le apedrearon eran como lo describe en el Libro de: (Hechos 7:51 al 54) “51 ¡Duros
de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo;
Como vuestros padres, así también vosotros. 52 ¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y
mataron a los que anunciaron de antemano la venida del Justo, de quien vosotros
ahora habéis sido entregadores y matadores; 53 vosotros que recibisteis la ley por disposición de ángeles, y no
la guardasteis. 54 Oyendo estas
cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él”. Esteban siempre hablo Palabra de Verdad.
Esteban era un hombre INVOLUCRADO,
lleno de Sabiduría, la cual lo
llevo a hablar con Autoridad y fue oído, por más furia que les hubiese causado.
¿Por qué se enfurecieron los que le oían?, PORQUE
LA VERDAD DUELE... Y la palabra de Esteban era Palabra de Verdad. Hermanos
si eres un siervo(a) involucrado y dispone su corazón, el Señor Jesucristo te
dará llenura del Espíritu Santo y la llenura trae consigo fe y sabiduría. Esteban supo aprovechar lo que recibió,
se mantuvo con PALABRA de VERDAD en su boca porque estaba preparado y sencillamente
por esto Dios le mostró su GLORIA.
Veamos
cómo se manifiesta la Gloria de Dios a los que se COMPROMETEN: (Hechos 7:55) “Pero Esteban, lleno del
Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la Gloria de Dios, y a Jesús
que estaba a la diestra de Dios”. Hermanos, si aún nos molesta, si aún se
murmura, si aún duele, no es posible ver los cielos abiertos para ver la Gloria
de Dios. Esteban vio nada más y nada
menos que al hijo de Dios a la diestra del Padre. Y por decir la Verdad con su boca de lo que estaba viendo, le costó
su vida. (Hechos 7:57 al 60)
“57 Entonces ellos, dando grandes
voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le
apedrearon; Y los testigos pusieron
sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él
invocaba y decía: Señor Jesús, recibe
mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta
este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió”. Hoy en día para nosotros el decir la Verdad es la Sana Doctrina de
Cristo…. Es actuar conforme la Verdad de lo que está ESCRITO. Decir
la Verdad es ser hacedores de la Palabra. Me podrás preguntar, que si por actuar conforme a la Palabra,
quizás mi padre o mi madre no me vuelven a hablar, quizás mis hijos
se burlen de mí, que cuando leo la Biblia delante de mi familia ya no me
soportan… Que cuando oro delante de mi esposo(a) inconverso…
Que los vecinos que cada 8 días me ven salir para reunirme en la Iglesia
murmuran de mi…. Etc. etc. (Marcos
8:38) “Porque el que se avergonzare de MÍ y de MIS PALABRAS en esta
generación adúltera y pecadora, el Hijo del Hombre se avergonzará también de
él, cuando venga en la GLORIA de su Padre con los santos ángeles”. Preguntémonos, ¿Se debe pagar
entonces por estar en la Sana Doctrina de Cristo, un precio? Si…
¿Cuál es entonces la diferencia? Si, tu corazón está dispuesto a
servir involucrándose, Dios no te va a dejar sufrir, Dios no te
va a dejar caer en vergüenza, cuando saques las Sagradas Escrituras,
todos respetarán, muchos oirán y tu madre, tu padre,
tu esposo(a) llegará a los pies del Señor Jesucristo porque ÉL te dio
una promesa que tú y toda tu casa serían salvos. Jehová Dios se cerciora de que tu nivel
espiritual aumente para que cuando el diablo quiera tocar tu carne, esta no te duela. Porque ya eres
uno con Jesucristo. Amen. Por esta
razón es que Esteban quizás no sufrió. Esteban pago un precio Se
involucró tanto que no solo vio, sino que, en
medio de tan difícil circunstancia, habló públicamente lo que vio y la
Gloria de Dios estuvo con él para que no sufriese.
El
cuerpo de Estaban pudo haber sido golpeado y dañado, pero esteban no debió haber sufrido
porque la Gloria del Padre estaba con él. Fijémonos por un momento en la
transición de su muerte: Ya había visto el cielo abierto, vio nada más
y nada menos que al Hijo de Dios a la derecha del Padre. Y en el momento en que
le están apedreando, Estaban se pone de rodillas y solo ora y dice: (Hechos 7:59,60) “59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu.
60 Y puesto de rodillas, clamó
a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado.
Y habiendo dicho esto, durmió”. Fueron
muy similares a las palabras que Jesús pronunció en el proceso de su muerte.
(Lucas 23:34,46) “34Y Jesús decía: Padre, perdónalos,
porque no saben lo que hacen. Y repartieron entre sí sus vestidos, echando
suertes. 46 Entonces
Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y
habiendo dicho esto, expiró”. De la misma forma Jesús se involucró y sucedió el
milagro más grande de toda la humanidad, milagro que fue incluso capaz de
cambiar la historia y partirla en dos A.C y D.C. aún para los incrédulos. De
igual manera lo primero que aprendemos de su vida es que era un varón de buen
testimonio, Esteban, un mesero
INVOLUCRADO, pudo ver el milagro más grande de su vida al ver que el
mismo Hijo de Dios y no solo esto fue el milagro, nos dejó por
testimonio a esta última generación de mucho más de 2000 años que cuando uno se involucra puede ver la
Gloria de Dios manifestada sobre muestras vidas. ¿Y tú que huella vas a dejar? (Hechos
6:7) “Y crecía la Palabra del Señor, y el número de los discípulos se
multiplicaba grandemente en Jerusalén; También muchos de los sacerdotes
obedecían a la fe”. Tener un buen
testimonio, en términos prácticos, significa portar y reflejar
de manera constante y autentico, las virtudes y las Gracias que
hemos recibido del Señor Jesucristo, (Hechos
6:3) “Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo”.
Una persona de buen testimonio es una persona, que testifica con sus palabras y
obras de la Gracia de Dios en él,
del cambio que Dios ha hecho en él
y del amor que Dios le ha dado.
Si queremos ser creyentes de buen
testimonio, debemos darle a
la oración y a la lectura y meditación de la Palabra, un
lugar preferencial en nuestro diario vivir. Lectura y meditación de su Palabra,
para saber cuál es el modelo de vida que Dios traza en ella. Oración,
solicitando Su gracia para vivir conforme a este modelo de vida y conducta que
Dios traza en Su Palabra. Las
Sagradas Escrituras, son nuestro Manual para nuestra vida, para
vivir bien delante de Jehová Dios, nuestro Padre Celestial y delante
de nuestro REY Jesucristo con la ayuda del Espíritu Santo.
Esteban: Varón lleno del Espíritu
Santo. La llenura del Espíritu Santo no sólo es asociada en medios carismáticos
con el éxtasis de hablar en lenguas, sino que aún en medios evangélicos
conservadores es a menudo asociada con experiencias aisladas en la vida del
creyente, sin embargo, nada puede estar más alejado de la realidad. Partiendo
de la base de que, en el momento de la conversión, el creyente es bautizado una
y sólo una vez con el Espíritu Santo del Dios VIVO, sellando así para siempre
su unión en Jesucristo, la llenura del Espíritu Santo se puede definir como la
potente y constante influencia que ejerce el Espíritu Santo en la vida del
creyente. Esta llenura, puede ser definida en otras palabras como la
manifestación evidente de las gracias obtenidas por el Señor Jesucristo en la
Cruz del Calvario y aplicadas de manera constante por el Espíritu Santo a la
vida del creyente. Una vida llena del Espíritu del Padre y de Jesucristo se
conforma sin lugar a dudas a una vida llena de: (Gálatas 5:22,23) “22
Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad,
fe, 23 mansedumbre, templanza; Contra
tales cosas no hay ley”. La llenura
del Espíritu Santo, insisto, no es un acto donde parece ser que
te están dando espasmos y temblores y aislado en el creyente,
sino que debe ser un “ESTILO DE VIDA” como bien lo podemos observar bajo la dirección del Espíritu Santo,
usando la Sana Doctrina de Cristo.
Esteban: Varón lleno de Sabiduría. Tercero.
Esteban era un varón lleno de sabiduría. Buscad,
pues, hermanos…, llenos de sabiduría. Sabemos que la sabiduría es un don de
Dios, y que ésta es necesaria
en la vida de cada creyente. El Espíritu Santo nos insta en su palabra
por medio del autor inspirado a “pedir de Dios sabiduría” (Santiago 1:5) “Y si alguno
de vosotros tiene falta de SABIDURÍA, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin
reproche, y le será dada”. Y nos alienta a que lo hagamos con la
certeza que Él mismo “la otorgará a todos abundantemente y sin reproche…”. Es natural entender que un creyente lleno del Espíritu Santo
es por necesidad un creyente sabio. Ahora, ser sabio no significa conocer todo lo referente a un
tema en particular. Por ejemplo, ser sabio, no significa
conocer exhaustivamente toda la VOLUNTAD de Dios revelada en su Palabra, sino
tener la GRACIA para entender, creer, obedecer y vivir
conforme al CONOCIMIENTO que se derivan de las gloriosas verdades que se
conocen. Ser sabio, por ejemplo, no significa conocer las demandas de
nuestro Padre Celestial por medio de Jesucristo, en su Palabra, sino tener la GRACIA para ENTENDERLAS
y someter de manera voluntaria y gozosa nuestras vidas en OBEDIENCIA
a ellas. El punto que quiero
subrayar es que puede haber conocimiento sin sabiduría. La sabiduría,
en contraste con el Conocimiento, manifiesta la Gracia de Dios dada al hombre
para que éste use el Conocimiento conforme los parámetros trazados por la
Escritura: (2 Corintios 3:4 al 6) “4 Y tal confianza tenemos mediante
Cristo para con Dios; 5 No que
seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros
mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios, 6 el cual asimismo nos hizo ministros competentes de UN NUEVO PACTO, no de la letra,
sino del Espíritu; Porque la letra mata,
más el Espíritu vivifica”. Por ejemplo, apartado de Jesucristo el
hombre puede adquirir cierto grado de Conocimiento de las verdades salvíficas,
pero sólo “en Jesucristo”, realmente, el hombre podrá tener la sabiduría para
usar, lo que conoce de estas Verdades salvíficas para beneficio de las almas.
De esta manera, muchos ateos y profesantes tienen un conocimiento teórico de la
Palabra de Dios, pero no la GRACIA
para creerla, y si no hay GRACIA
para creerla, mucho menos habrá la GRACIA para OBEDECERLA y vivir
guiado por ella. Esteban era un varón lleno, tanto de conocimiento
Escritural como de sabiduría dada por Dios. De esta premisa, sugiero a los
creyentes, observar lo siguiente: Todos debemos esforzarnos por estudiar,
conocer y escudriñar la Escritura en medio de una época de ignorancia. Y la
razón es sencilla: Si no hay Conocimiento de las Verdades Escriturales es
imposible que podamos proclamar el Evangelio. De igual manera, si no hay Conocimiento
de las Verdades Escriturales es imposible que podamos defender nuestra fe y la
Sana Doctrina de Cristo. Entonces, no sólo debemos esmerarnos por conocer qué
es lo que dice Dios en Su Palabra, sino que debemos orar para que el Señor
Jesucristo nos conceda la GRACIA para
vivir conforme a lo que conocemos de Dios en Su Palabra.
Esteban: Fue un Varón lleno de fe. (Hechos 6:5) “Agradó la propuesta a toda la multitud; y eligieron a Esteban, varón lleno de fe y del
Espíritu Santo, a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Parmenas, y a
Nicolás prosélito de Antioquía”. ¿Cómo podemos discernir a alguien lleno de fe?
Me inclino a creer que el testimonio
de Esteban era un evidente reflejo, no sólo que Esteban había creído en Jesucristo para salvación,
SINO también, que sus obras reflejaban el sometimiento
suyo a Jesucristo como su Señor. Las
Sagradas Escrituras dicen de los que se INVOLUCRAN: (Stg 2:18) “Pero alguno dirá: Tú tienes
fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por
mis obras”. Es muy lamentable que una persona profese su fe en Jesucristo como
Salvador, pero que sus obras no reflejen la fe de la que sus labios hablan.
Este versículo evidencia la estrecha conexión o inseparabilidad entre la FE COMO GRACIA salvífica en una
persona y el producto de dichas gracias salvíficas en la vida de dicha persona
(palabras, pensamientos y, sobre todo, obras). De otro lado, Esteban es un
claro ejemplo del creyente cuya confianza en el Señor Jesucristo y en sus
promesas, no sólo es evidente, sino abundante. La evidencia de tu fe la veremos mientras te involucras de la OBRA misma,
mientras que la abundancia de tu fe, la observamos en lo contundente
de lo que dices es lo que haces. Pero no sólo esto, sino que en Esteban
también observamos evidencia y abundancia de fe justo en el momento más difícil
de su vida, antes de morir, cuando exclamó con plena confianza e indubitable
certeza: (Hechos 7:60) “Y puesto de
rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y
habiendo dicho esto, durmió”.
Predicador de la Sana Doctrina de Cristo: Víctor. Si usted no tiene la
intención de guardar esta hoja, tenga la amabilidad de entregarla a otra
persona interesada. Para la difusión gratuita entre cristianos, se permite fotocopiar
esta hoja (por favor no cambiar el texto).
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